La marca de iluminación nace de una temprana intuición de un joven sueco, que quería devolver la luz a estar cerca del hombre, como un confortable instrumento, abriendo los ojos de los que los cierran, sin cegarlos. Entre las creaciones es posible apreciar elegantes lámparas de pared, lámparas de pie, lámparas de mesa, como la W153 Île, y lámparas colgantes, como la W151, a través de las que Wästberg ofrece a los ambientes domésticos una atmósfera nueva, sofisticada y encantadora. La marca se caracteriza sin duda por un profundo respeto por las necesidades humanas fundamentales, expresadas a través de la combinación de estética, tecnología de vanguardia y conservación de los recursos. Lo que queda es la estrecha colaboración con algunos de los más renombrados arquitectos, diseñadores y expertos en iluminación del mundo.